La barba es el elemento más personal de nuestro rostro, el buque insignia de nuestro outfit. Los incondicionales de la barba sabemos lo importante que es peinar, recortar y mimar la barba cada día. Pero si, además de cuidar la barba, quieres que luzca en todo su esplendor, no puedes prescindir de aplicar, con regularidad, el producto estrella de todo barbudo sofisticado y con estilo: el aceite para barba.
¿Qué es el aceite de barba?
Este aceite, creado especialmente para la barba, es una combinación de diversos aceites esenciales: jojoba, argán, aceite de almendras naturales, aceite de romero, etc. Su uso contribuyen a cuidar la barba, a hidratarla y mantenerla sana y manejable, a la vez que evita la sequedad y descamación de la piel facial. Además, todos los aceites se absorben muy rápidamente, lo que evita que la sensación sea grasa. Lo que la barba no necesita, se evapora. La calidad de sus componentes es decisiva para que el aceite para barba que se aplique sobre la barba sea mejor y más efectivo. Determinados aceites contribuyen, además, a estimular el crecimiento natural del vello facial y a fortalecerlo. ¡Y no nos olvidemos del aroma, con unas gotas de este aceite para barba podrás gozar de los aromas más naturales e intensos y mantener durante todo el día una sensación placentera y refrescante!
¿Qué beneficios tiene?
El uso de este aceite sobre la barba no es una cuestión meramente estética sino que resulta imprescindible para mantener la barba y la piel del rostro totalmente sanas. El crecimiento de la barba puede resecar mucho la piel sobre la que crece el vello facial, por lo que es muy importante mantenerla hidratada para evitar la sequedad, la descamación y el picor. Como beneficios añadidos, este aceite para barba especial evita que se forme la antiestética caspa en el pelo de la barba, que se estropeen las puntas, que se debilite o (incluso) se caiga. Por otro lado, este tipo de aceite nos ayuda a cuidar la barba al máximo y a mantenerla en las mejores condiciones higiénicas, protegiendo de la misma restos de suciedad, polvo, polución o tabaco. Otra cuestión a tener en cuenta es el efecto que las inclemencias del tiempo, como el frío o el viento, pueden tener sobre el pelo de la barba, secándolo y estropeándolo, hasta el extremo de darle un aspecto apagado y descuidado. En estos casos el uso de este aceite para barba específico para barba obra verdaderos milagros, permitiendo que el pelo recupere una textura hidratada, natural y manejable. Por último y, no por ello menos importante, este aceite para barba contribuye a darle a tu barba el mejor aspecto estético, a la vez que te ayuda a manejarla con extraordinaria facilidad y darle la forma deseada dominando, incluso, el pelo más rebelde de la misma. Como colofón, el magnífico aroma que desprenden los aceites orgánicos, totalmente naturales de su composición, te relajan y te proporcionan una agradable sensación de frescura y bienestar durante todo el día.
¿Cómo se usa el aceite para barba?
La frecuencia del uso del aceite para barba depende especialmente del estado concreto de tu barba. Cuanto más seca y estropeada se encuentre, mayor cantidad e intensidad requiere, siendo aconsejable un uso diario. En los casos en los que la barba esté en mejores condiciones puede aplicarse de dos a tres días por semana, aunque para un estado y mantenimiento perfecto lo ideal es su uso diario.
Aceite para barba. El momento perfecto
El momento perfecto para aplicar el aceite para barba es después de la ducha, ya que los poros de la piel están abiertos y absorben mejor cualquier tipo de sustancia o tratamiento. Es aconsejable secar la barca previamente para retirar los restos de humedad. El modo más eficaz de aplicar el aceite consiste en depositar sobre las palmas de las manos una cantidad que puede oscilar entre dos y cinco gotas de aceite de barba, según cada caso. Posteriormente procederemos a frotar suavemente y a repartirla de manera uniforme con un ligero masaje sobre la totalidad de la barba y la piel que queda debajo. En el caso de barbas muy largas o pobladas se recomienda comenzar por el mentón y, poco a poco, ir repartiendo el resto (para bálsamos te aconsejamos que leas nuestro artículo diferencias entre Bálsamo para barba y aceite). Para finalizar moldearemos la barba según la forma y aspecto deseado obteniendo un resultado espectacular, no solo en cuanto a la forma, sino también, en el brillo y el perfume que la barba desprende. Para los más caprichosos, se puede añadir un toque final pasando sobre la barba durante unos veinte segundos, a temperatura media, el secador de pelo. De este modo la forma del pelo de la barba quedará totalmente fijada, a la vez que su aspecto será pulido, brillante e irresistible al tacto.
Si estás pensando en un buen aceite, te podríamos recomendar cualquiera de los que tenemos disponibles en nuestra tienda online de cuidado personal, pero últimamente estamos especialmente caprichosos con éste:
¡Que tu barba lo disfrute!